Sabiduría Angélica Sobre El Divino Amor y La Divina Sabiduría #414

От Емануел Сведенборг

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414. (xiv.) El amor, o la voluntad, puede ser semejantemente elevado, y recibir lo que pertenece al calor del cielo, si ama a la sabiduría, su esposa, en aquel grado.

Que el entendimiento puede ser elevado a la luz del cielo y separar a la sabiduría en esa luz, ha sido demostrado en la precedente proposición y frecuentemente antes; pero que el amor o la voluntad es igualmente capaz de elevación, si ama lo que pertenece a la sabiduría, pero que el amor o la voluntad es igualmente capaz de elevación, si ama lo que pertenece a la luz celestial, o a la sabiduría, ha sido también frecuentemente demostrado. Aun cuando el amor o la voluntad no se haya elevado por medio de algún honor, gloria o riqueza como un fin, sino por el amor del uso, no por causa de sí mismo, sino por causa del prójimo; y porque el hombre no está dotado de este amor, sino por el cielo, provenido del Señor, y está dotado con él por el Señor cuando huye de los males por ser pecados; por lo mismo, por estos medios el amor o la voluntad es capaz de elevación; pero sin ellos, no. Pero el amor o la voluntad se eleva en el calor del cielo, mientras que el entendimiento se eleva dentro de su luz; y si ambos se elevan, hay un casamiento entre ellos allí, que es llamado casamiento celestial, porque es del amor y la sabiduría celestiales. De allí la exposición de que el amor también se eleva, si ama a la sabiduría, su esposa, en aquel grado. El amor en relación al prójimo, que viene del Señor, es el amor de la sabiduría o el genuino amor del entendimiento humano. Eso se compara a la luz y el calor en el mundo, la luz existe sin calor y con él; sin calor en el invierno; y con él en el verano; y cuando el calor existe juntamente con la luz, todas las cosas florecen. En el hombre la luz en el hombre corresponde a la del invierno, es sabiduría sin amor; y la que corresponde a la luz del verano es sabiduría con amor.

  
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Traducido por el Dr. Calleja al español de la traducción al inglés por el Rev. John Whitehead. Transcrito y revisado por David Simpson, y también revisado por Daniel Calvo, y por los reverendos Andrew Heilman y Johnny Villanueva.